Te habían asignado un divorcio bastante problemático pero ya casi resuelto, hacía bastante tiempo que trabajabas en el.
Se acercaba el almuerzo y te preguntabas si Paula estaba libre para almorzar con vos.
Hacía rato que te habías acostumbrado a las miradas curiosas que te habían perseguido toda la mañana, como acusándote, como persiguiéndote.
Como si no fuese poco con la loca de Silvia, tenías que lidiar con curiosas que pensaban tener algún tipo de derecho para reprobar tu conducta, tus actos, tus pasos. Necesitabas un poco de paz, de aire fresco, y se te ocurrió que tu novia sería capaz de proporcionártelo.
Te acercaste a su oficina y escuchaste voces. Frunciste el ceño al descubrir la voz de Silvia, muy compinche con Paula, te pareció demasiada camaradería.
Entraste y miraste desde la puerta. Silvia se alertó, no así Paula que estaba de espaldas.
-Qué querés?- te preguntó Silvia, haciéndote frente.
Paula se alertó y se dio vuelta.
Tu cara lo decía todo, no la habías visto en toda la mañana y sin dudas te sorprendió.
-Qué, qué te pasó?- le preguntaste temblando, mientras te acercabas a ella preocupado.
-Por favor dejame Pedro, ya lo hablamos - te dijo con lágrimas en los ojos.
-Qué es todo esto Pau?- tu voz sonaba bastante preocupada. Extendiste la palma de tu mano pero ella se escabulló de tu alcance.
-No me toques, por favor.- su voz sonaba bastante apagada, como derritiendo cada palabra, cada sílaba, cada letra.
-No otra vez- te pidió para salir corriendo.
-De verdad se siente terrible que te dejen no Pepe?- te preguntó Silvia girando en su silla de computadora.
-Que tenes que ver en todo esto?- le preguntaste
-Yo? Nada...Yo no le pegué...vos podes decir lo mismo?
Inhalaste y exhalaste. Varias veces. Necesitabas salir de ahí.
***
Si de algo servía tener una amiga modelo, era que maquillaba como los dioses.
Hace dos años, cuando cortó con uno de sus novios (no recordas cual porque en ese entonces Zaira jugaba a 25 puntas), tu amiga voló a Los Angeles para un curso de maquillaje caracterizado. Aparentemente era para cuando incursione en el cine (cosa que nunca hizo, y probablemente nunca haga).
Nunca te había parecido demasiado útil ese curso que se mando ella (ni a vos, ni a todo su entorno, que se le rió en la cara cuando ella lo comentó, bastante frustrante fue a decir verdad)
Esta mañana no te había parecido tan inútil ese curso y la llamaste inmediatamente.
Por alguna extraña razón ella estaba despierta, y vos avisaste en el trabajo que te retrasarías un poco por unos inconvenientes, nada mejor para cubrirte un poco.
-Espero sea demasiado importante, porque sabes que esta no es mi mejor hora- te dijo entrando y tirando su cartera en el sillón.
-Es bastante urgente sabes...
-Y por qué se supone que no te podes maquillar vos solita?- te preguntó mientras ponía el agua para el mate (con plena libertad)
-Porque necesito...algo más...característico...- le dijiste sutilmente
-Más característico?- y ahora si tenías toda su atención.
-Te acordas el curso de LA?
-El curso por el que te reíste 4 días seguidos, incluso cuando me llevaste al aeropuerto?
-Ay nena, no seas rencorosa....si, ese.
-Claro que me acuerdo, cuando había cortado con Matías...o era Lucas? No, creo que era Manuel...bueno alguno de esos era seguro.- dijo pensativa como si realmente fuera importante.
-Necesito que me maquilles un ojo
-Uno solo? Siempre fuiste medio deforme, pero te superas día a día. Tiene algo que ver el bombón?
-El bombón sería Pedro?- le preguntaste con una sonrisa en tu cara
-Claro, aunque estoy muy enojada, por que se supone que Victoria lo conoce y yo no?
-jajjajajajaja
-No es gracioso Paula, por qué no me lo presentas a mí? Me dijo Vic que conociste a tu suegra
-Ey...por qué sabes tanto?
-Mirá querida acá la enojada tendría que ser yo...decime que tenes algo para comer porque muero de hambre
-No estés enojada, quería tenerlo seguro para que no se quiera ir con vos- le dijiste riendo mientras bajabas unas palmeritas que habías comprado ayer.
Te acordabas de la mañana y te reías sola. Y menos mal que sola, porque sino tu historia tendría poca credibilidad.
-Entonces a ver si entiendo...vos pretendes que te maquille un ojo para aparentar que el potro cordobés te pegó?
-Ves que cuando querés tus neuronas hacen contacto cachorra?- le dijiste vos
-Tarada- te dijo pegándote en el hombro.
Ibas por el pasillo rumbo al baño de mujeres, entraste y a los dos minutos sentiste abrirse la puerta.
La cerró y te miró.
***
-Qué paso? Que hiciste?
-Vas a arruinar todo...lo hablamos en casa, por favor
-Necesito saber que pasa
-Ya casi la tengo...se siente en confianza... por favor Pedro...
-En casa hablamos, te amo, lo sabes no?
-Chau maltratador, chau chau.
-Qué me miras?- le preguntaste
-Yo no te miro
-Entonces parece
-No siempre es lo que parece, no?- te preguntó Joaquín, aunque desconocías en que medida te lo preguntaba, y en que medida lo afirmaba.
Guardaste todo para irte a casa, y al fin tener esa charla que se debían con Paula.
Pasaste por la puerta de su oficina y la escuchaste.
-Deberías denunciarlo- decía Nahuel parado al lado de tu novia.
-Si queres te acompaño- tiró Silvia
-Y vos? vas a denunciarlo?- preguntó Paula
-Emmm... no se, por qué?
-Porque quizás si vos lo hicieras yo me animaría- arriesgo Paula- total solo revisarían la veracidad de tus golpes.
Silvia se paró de la silla y empezó a caminar hacia la puerta
-No, yo simplemente no puedo hacer eso, después de todo es el padre de mi hijo.
Vos, decidiste dejarte ver.
-Es eso? O qué cualquier medico podría darse cuenta que esos no son golpes de un tercero?- le preguntaste mirándola a los ojos.
No todo es lo que parece. No todo parece lo que es.
Detrás de un buen maquillaje...se esconde una gran mentira...o un gran dolor.
TO BE CONTINUED.
buenísimo,ojala se descubra de una buena vez la mentira de silvia.
ResponderEliminarbuenicimo lo que quiere pau es descubrirla genial amo a nove ojala subieras mas seguido
ResponderEliminar